Se nota que no lleva sujetador ni tanga bajo el vestido de seda, la sirvienta amateur no pasa del primer día. La rubia de rulos hermosos se ve tan sensual al caminar haciendo tambalear pechos que el nuevo jefe no resiste. Se acercó por detrás, reposó mano en nalga, lo dejó, señal suficiente. Comenzó a tocar ese redondo trasero hasta que ella se dio vuelta para pedir un beso. Así esta sirvienta amateur será follada en el primer día de trabajo.