Joven compañera de alquiler es una rubia muy caliente que está necesitada de sexo y no importa si es plástico o carne. Athena May ha comprado un nuevo consolador semi automático, está con la concha empapada de solo pensar. Sentada comienza, es entretenido, el nuevo sirviente entra y sale casi sin que haga nada, buscará varias posiciones pero no alcanza, por suerte es pillada por el muchacho a quien no deja ni hablar, menos escapar. Se adueña de la verga mamando con ganas, luego montando y haciendo que eyacule en varias ocasiones, sea en vagina, en cara, no importa, el objetivo es coger.